La FIFA prueba con revolucionar el fútbol

La FIFA prueba con revolucionar el fútbol

Esta primera semana de junio la FIFA ha decidido darle un giro de tuerca más a la normativización del fútbol y ha preparado un borrador con nuevas reglas. Se trata en total de 94 cambios que desde el 1 de junio han entrado en vigor. Pero, como he dicho, se trata de un borrador, puesto que la intención del máximo organismo del fútbol mundial es probar durante un año los resultados de la aplicación de estas nuevas reglas. 



Este experimento lo lleva a cabo el organismo de Gianni Infantino junto con la International Football Association Board (IFAB), organismo que custodia las reglas del deporte del balón. En este paquete de medidas aparece la tecnología, pero también se revisa la autoridad de los árbitros, la materia del terreno de juego, los fueras de juego, los lanzamientos de penalti o la dirección del balón en el saque inicial de los partidos. 

La primera ley que destaca la IFAB acerca del terreno de juego radica en la permisión de combinar césped natural con césped artificial: The field of play must be a wholly natural or, if competition rules permit, a wholly artificial playing surface except where competition rules permit an integrated combination of artificial and natural materials (hybrid system). Una de las razones por las que se permitirá esta regla será para los casos en que el césped esté en muy mal estado, haya un mínimo de superficie sobre la que se pueda jugar. Por ello, esta norma establece como requisito expresamente que "el color de la superfície artificial ha de ser verde". Es entendible, ¿no? Tampoco es plan de que veamos campos flower power.

El presidente de la FIFA, Gianni Infantino, en un congreso de la UEFA/ Imagen: Europa Press

Por otra parte, también se refuerza la autoridad de los árbitros. Y me parece muy bien. El colegiado, como es bien sabido, tiene facultad para sacar tarjetas amarillas o rojas durante un partido ya sea por una entrada fea ya sea por un insulto. Pero con estos nuevos cambios, desde el momento en que pise el terreno de juego, no sólo tendrá autoridad para inspeccionar el césped, sino que podrá expulsar directamente, sin tarjetas, a aquellos jugadores, entrenadores o demás miembros de cualquier equipo que muestren desprecio hacia él. Las tarjetas amarillas y rojas sólo se reservarán para el juego propiamente dicho: Has the authority to take disciplinary action from entering the field of play for the pre-match inspection until leaving the field of play after the match ends (including kicks from the penalty mark). If, before entering the field of play at the start of the match, a player commits a sending-off offence, the referee has the authority to prevent the player taking parte in the match; the referee will report any other misconduct

Pero seguramente las dos medidas más importantes sean la llegada de una cuarta sustitución, sólo en los casos en que haya prórroga o la creación de unos árbitros asistentes de vídeos, para que se determine sobre si una acción es gol o expulsión. Además, hacer la famosa paradinha desde el punto de penalti se va a castigar con tarjeta amarilla, siempre y cuando se haga iniciada la carrera. Por su parte, el portero que en la ejecución del penalti se adelante de la línea de gol también será amonestado con tarjeta amarilla. Otras medidas de menor calado pero que podemos mencionar son que se va a tener en cuenta los segundos que pierdan los jugadores bebiendo agua a la hora de añadir tiempo extra, que el saque de centro se podrá hacer hacia atrás y no obligatoriamente hacia adelante como hasta ahora o que cualquier suplente o entrenador que interrumpiese el juego se considerará falta o penalti.

Como hemos dicho anteriormente, se trata de un conjunto de reglas que desde el 1 de junio se aplican y que en función del resultado de su aplicación se asentarán o no. Por lo tanto, habrá que tener una serie de aspectos en cuenta a la hora de ver según qué jugadas. No está mal que el aficionado se informe antes de gritar o que el entrenador conozca un poquito más sus facultades a la hora de hacer los cambios. No sea cosa que le pase como a Rafa Benítez con Denis Tcheryshev en el Ramón de Carranza